jueves, 30 de septiembre de 2010

CHUNGO, CHUNGO, CHUNGO


-El miércoles pasado me cogió la “juerga general” en la T-4 del aeropuerto de Barajas. Eran la ocho de la mañana y estábamos desayunando cuando un “piquete informativo” entró en la cafetería, se supone que para informar. Se dirigieron directamente al camarero que atendía detrás de la barra: “¿Se puede saber que c… estáis haciendo? El camarero los miró con evidente temor: “Hemos tenido que abrir, pero ahora mismo vamos a cerrar, cobro y nos vamos” Después se dirigió a las once personas que allí estábamos: “Señores, vamos a cerrar, por favor, acaben porque voy a apagar las luces en tres minutos”. Cuatro de los “informadores” se fueron, pero un quinto se quedó vigilando. Chungo.

Un periódico nacional que va de riguroso, sacó un editorial haciendo una valoración originalísima de fracaso de la huelga: “El fracaso de los sindicatos supone un respaldo social al Gobierno”. Afirmaba, sin que se le vieran los colores, que la ciudadanía no había respaldado la huelga porque en el fondo está de acuerdo con las políticas sociales y económicas de Zapatero”. Chungo.

Cándido Méndez, el todavía líder de UGT, aprovechó el espacio que le cedió TVE: “La huelga ha paralizado al 80% del país y este aldabonazo debe hacer que el Gobierno rectifique sus políticas sociales”. Mucha cara o mucho desconocimiento por parte del barbudo. Después salió el ministro de Trabajo para afirmar dulcemente que la huelga apenas había movilizado al 18%, pero que el Gobierno no valoraba el seguimiento como un fracaso”. ¡Qué pestazo a huelga pactada! Chungo, chungo.

Joaquín Sabina, a quien se lo perdono todo, se sitúa ahora en el “antizapaterismo” porque ha obligado a los sindicatos a convocar una huelga general contra el PP y se duele porque “la peña lo meta a él en la coctelera del “club de la ceja”. Si supiera su dirección le enviaría un montón de fotografías con su bombín, su guiño y su dedito en la ceja. Otro miembro destacado del club se duele porque Sabina se duela, después de haber sido el creativo del gesto. Chungo.

El mismo día de la huelga general, la Junta se descolgaba de cualquier valoración sobre la misma, salió por peteneras y declaró su apoyo a homosexuales muy concretos. De los homosexuales encarcelados en Cuba no dijo nada y todo se redujo a mostrar solidaridad con los colectivos gays africanos y sudamericanos. Muy selectiva. Los homosexuales encarcelados y torturados por su “desviación” en la Cuba del barbudo deben tener, como los políticos que están en huelga de hambre, la categoría de delincuentes comunes. Chungo.

En Badajoz, el sector más afectado por la huelga general fue el de la basura y el de los autobuses urbanos. Lo de los autobuses urbanos fue fácilmente detectable porque no pasaban, pero lo de la basura… ¿Quién pudo establecer la diferencia entre un día de huelga y un día de trabajo? Chungo.

La mejor imagen de la huelga general la dejaron algunos piquetes informativos integrados por jovencitas que lucían el “cerrado por huelga general” pegado en el culo, en el pecho y en la entrepierna. Chungo, pero no tanto.

No hay comentarios: