sábado, 30 de diciembre de 2006

Fumar mata, Doña Esperanza


Esperanza Aguirre, la presidenta de la Comunidad de Madrid, me parece una señora de genio e ingenio, con ideas, criterio y discurso propio, pero que en su afán de oposición hacia todo lo que llegue del PSOE, es capaz de caer en ridículos sin cuento. Y eso es lo que le está pasando con sus rocambolescas interpretaciones de la “ley antitabaco”. Después de torcer los argumentos, buscando atroches legales a una ley que vigila por la salud pública, se supo, con mucha antelación, que durante las fiestas navideñas los inspectores sanitarios harían un paréntesis, silbarían y mirarían para otra parte, para que establecimientos y fumadores pudieran seguir, los primeros con su negociete y los segundos con su vicio. ¿Y los no fumadores? Los que no fuman han tenido la potestad de quedarse en casita o participar de la intoxicación colectiva, porque doña Esperanza, tan permisiva ella, tan liberal y tan antiprohiciones, anda en su pulso particular con la ministra de Sanidad y no tiene tiempo para minucias semejantes.

Pero fumar mata, doña Esperanza, mata de verdad, mata lenta, fija y dolorosamente. Ya se sabe todo sobre las consecuencias del tabaquismo y aún permitiendo que cada cual tiene derecho a elegir, la Ley se ocupa esencialmente de proteger los derechos de los no fumadores, de los que no quieren oler las pestilencias del tabaco, de los que no desean ser fumadores a la fuerza y por la fuerza de una costumbre tan estúpida como malsana. La Ley antitabaco es pusilánime, corta, carente de efectividad real y, además, está llena de complejos, contradicciones e indecisiones que la hacen vulnerable en casi todo su articulado. Tal como está redactada, el fumador puede seguir alquitranándose los pulmones casi como antes, pero al menos imponía unas restricciones en el ámbito laboral y del ocio que servían como asidero a los no fumadores. El amplio margen que la Ley concede a las CC.AA debería aprovecharse para perfilarla y ajustarla, pero doña Esperanza se ha erigido en la protectora del tabaquismo y en su campaña de memeces parece que incluso ha dado instrucciones para que en días punteros no se extreme la vigilancia. Es exactamente lo opuesto a lo que debería de hacer un político responsable.

Pero fumar mata y eso no es una broma. La salud pública no puede ser arma con la que se deba luchar políticamente y doña Esperanza debería ser delimitar sus campos de batalla para no caer en estrambotes que concluirán por perjudicar a toda su comunidad y, al alimón, a ella misma, empañando su trayectoria de política honesta y eficaz.

En Extremadura aún no se ha elaborado la adaptación oportuna, y falta que hace, porque para los no fumadores todo está prácticamente igual. Creo que en toda Extremadura, pueblo a pueblo, apenas hay media docena de bares donde no se permita fumar y en el gremio de la restauración aún es peor, porque es imposible degustar un retinto o un jamón sin las pestilencias del humo. Esperamos confiados que el rebufo de doña Esperanza no contamine nuestra decisión, porque ya se sabe que en España cada necedad hace legión.

sábado, 16 de diciembre de 2006

Puerto Hurraco


Puerto Hurraco figura en nuestra memoria como sinónimo de viscelaridad, cerrilismo, animadversión y odio ancestral, porque aún siendo un pueblo de la Serena extremeña bonito, pacifico y acogedor, un mal día dos hermanos, con el alma corroída por el odio, decidieron salir de su cubil de alimañas para verter sobre sus vecinos toda la irracionalidad que llevaban dentro. Desde entonces el nombre de Puerto Hurraco tiene resonancias que no se merece y, tal vez para siempre, su suerte quedará ligada a la masacre que por sus calles protagonizaron los hermanos Izquierdo, Emilio y Antonio, azuzados por el resentimiento de sus hermanas Ángela y Luciana.

Un día negro de agosto de 1990, los dos hermanos decidieron consumar la venganza que los cegaba y a tiros de escopeta mataron a nueve de sus vecinos, de forma indiscriminada, porque su odio alcanzaba a todo el pueblo. Y así comenzó a tejerse la resonancia negativa que en toda España tiene hoy Puerto Hurraco, resucitando a la Extremadura profunda que sólo existe en las testas anquilosadas de muchos desinformados, porque el síndrome de “los izquierdos” no tiene cuna definida.

Durante mucho tiempo Don Benito estuvo ligado al crimen de Inés María; Fuente Ovejuna es el lugar de la indignación compartida; Teruel es la cuna de los amantes; Cuenca sigue proyectando la sombra de su crimen; Zalamea aún representa la dignidad de su alcalde; Móstoles es la rebelión contra los invasores, Guernica, la desolación; Paracuellos el fusilamiento; Aranjuez es el eco de un motín; no se sabe si es Aragón de Agustina o Agustina de Aragón; Casas Viejas es la represión brutal, Los Galindos… ¿Y Linares?. En linares murió Manolete.

Son pueblos con huella propia, vida propia, con historia y hechura definida, pero son pueblos marcados por un hecho, generalmente luctuoso, que queda colgado en la memoria colectiva. Y ese es el caso de nuestro Puerto Hurraco que, como bien dice Alberto González, tiene una toponimia que facilita el recuerdo de aquella tarde de tormento: “¡Hombre, Tomás, no hubiera sido lo mismo si eso ocurre en El Jardín de Santa Lucía!” Y es verdad, tan verdad como que Puerto Hurraco está al margen de los hermanos Izquierdo, a los que he conocido hasta donde se podía conocer a los hermanos Izquierdo.

Los tuve como alumnos -es un decir- en el Centro Penitenciario de Badajoz y en ellos identifico al eslabón perdido, al humano al que le falta un hervor para llegar a serlo y al hombre a medio camino entre lo que somos y lo que parecemos. No caeré en la exageración de señalarlos como irracionales, pero ambos tenían un pellizco que los separaba de la normalidad. A los dos, inseparables, encorvados y en contacto permanente, les gustaba dibujar arabescos con bolígrafos de colores, que cogían como su fueran puñales. Los dos pasaban horas rellenando cuadernos de caligrafía, los dos me pedían interminables sumas, restas, multiplicaciones y los dos dibujaban círculos engarzados, ayudándose con monedas de diferentes tamaños. Siempre recelosos y acechantes, lo hacían todo tan juntos que parecían un sólo hombre con dos cabezas, aunque las dos pensaban lo mismo, a la misma hora y de la misma forma. No se relacionaban con nadie, eran monosilábicos y yo creo que en estos dieciséis años de reclusión, jamás salieron de ellos mismos y nunca tuvieron curiosidad por ver lo que había fuera de sus cabezas. Nada pedían y nada daban. Por no dar, no daban ni la lata.

Hace unos días ha muerto Emilio, que no sé si era el mayor o el menor, porque los dos gozaban de la misma indefinición pero, contra lo que se está afirmando, era el que tomaba las decisiones en ese dúo de sonámbulos, encerrados en la modorra común a la que estaban soldados. Por un momento, me gustaría asomarme al alma, posiblemente insondable, de Antonio, para mirar lo que bulle allí dentro y poder entender la paz que le reporta su irracional venganza y el alarido sordo ante la tumba de su hermano: “¿Te vas con la satisfacción de que tu madre ha sido vengada?” Ni el tiempo, ni la enfermedad, ni la cárcel, han doblegado el odio acumulado y nada ha servido para abrir las puertas en esas pobres cabezas. Puerto Hurraco merece la solidaridad de todos y yo desde aquí la reivindico.

sábado, 9 de diciembre de 2006

Muy gallardo


Días pasados, en un hotel lejos de España, pongo la CNN internacional y me encuentro con Extremadura, Badajoz, Cáceres, Mérida, con una cuidada panorámica de Jerez de los Caballeros y con la singular figura de Alfonso Gallardo. La primera sensación fue de sobresalto, porque soy amigo de Alfonso Gallardo, lo quiero y lo admiro. Entro a media noticia y no entiendo muy bien lo que dice el locutor, pero me tranquilizo porque deduzco que el industrial extremeño ha vuelto a dar un zarpazo, ahora europeo, en el difícil mundo del acero y que su sombra, más alargada que la del ciprés, ya se proyecta en Alemania y tiene cabida en la portada de un informativo internacional. Evidentemente se trataba de una noticia muy importante, de indudable alcance industrial que, ya me dirán ustedes si no era extraño, partía de Extremadura.

He escrito algunas cosas sobre Alfonso Gallardo, obligadamente laudatorias porque desde hace muchos años considero que es una de las personas que más han hecho y más han arriesgado por Extremadura. Lo conozco bien, sé lo que lo impulsa, sus motivaciones y desvelos y cada día se acrecienta más en mí la admiración que me produce un personaje de su talla empresarial y categoría personal. Alfonso Gallardo es un lujo sobre el que, como suele ocurrir, vertemos un montón de idioteces, acostumbrados como estamos a criticar lo que no entendemos, siempre con desproporción y casi siempre con mucha malicia y no poca ignorancia. ¿Qué tiene que hacer Alfonso Gallardo para hacerse perdonar por haber partido de la nada absoluta empresarial y abrir hoy los informativos de la Unión Europea?

Conociendo la magnitud del grupo empresarial que preside, al principio me resultaba paradójico que se situara a la Junta inmediatamente detrás de sus éxitos, porque las iniciativas empresariales de la Junta sorprenden precisamente por la contundencia y la perdurabilidad de su fracaso industrial. Y hace siete años (HOY 22.5.99) ya dije que la Junta no tiene dinero para levantar un tinglado como el de Alfonso Gallardo y, lo más difícil, porque algo así no se levanta con dinero. Pero el dolondón de los cencerros sigue propagando su eco y hoy ya me resulta cabreante que se insista en semejantes paparruchas que, antes de nada, delatan nuestra mezquindad y las cortas entendederas que tenemos. Hace pocos días un empresario aseguraba que con las ayudas que tiene Alfonso Gallardo, era fácil exponer como él expone y subir como él sube, pero yo sigo a la espera de que alguien, con un mínimo de rigor y decencia, me de un solo dato que demuestre que Alfonso Gallardo se nutre de las subvenciones o recibe un euro más de lo estipulado. A veces uno se calla por prudencia y porque resulta políticamente incorrecto defender a la socorrida diana sobre la que clavamos nuestras miserias, pero cada día estoy más convencido de que lo que se dice, por indemostrable, es mentira. Y cada día me asiento más en lo que sé de primera mano sobre Alfonso Gallardo y su importancia real.

¿Saben ustedes lo que creo? Pues que a la Junta le resulta incómodo un empresario que antes de cerrar un capítulo ya está abriendo otros dos o tres y cada uno de ellos más arriesgado y sorprendente. Las apuestas de Alfonso Gallardo son órdagos continuos, porque es un hombre que se la juega en cada una de ellas y su capacidad de riesgo hasta parecería suicida si el resultado final no fueran éxitos en cadena ¿Cómo se justifica que entre el largo centenar de medallas de Extremadura, Alfonso Gallardo, que es el que más se la merece, no tenga la suya todavía? Se justifica porque a Rodríguez Ibarra, tan valiente él, le ha temblado el pulso y entre los merecimientos del empresario y los intereses políticos ha optado, como siempre, por la política.

Por todo esto uno se alegra de que Alfonso Gallardo, que está al margen de todas estas bobadas, siga creyendo en la inapelable ley del esfuerzo y, pese a todo, siga creyendo en Extremadura. Con gente así, es fácil creer en los beneficios de la clonación humana.

sábado, 2 de diciembre de 2006

Muere el cerdo de George Cloony


Prensa, radio y televisión se han hecho eco internacional de la tristísima noticia del deceso de Max, el cerdo de 130 kilos, que ha compartido la vida de George Clooney durante los últimos 18 años. La noticia, servida en forma de exclusiva para la revista estadounidense “People”, ha dado la vuelta al mundo y llenado de dolor a los habitantes de Las Colinas de Hollywood, que con evidente actitud de duelo visitaban la casa del inconsolable Clooney, mientras decenas de cámaras de televisión, apostadas en las inmediaciones desde primeras horas de la mañana, retransmitían el luctuoso suceso, entrando en directo en los informativos.

George Clooney, de promoción de su última película, “The Good German”, no estaba en la residencia que compartía con Max, aunque lo suspendió todo para poder asistir al sepelio y se lamentó de no haberlo acompañado en esos últimos momentos, aunque se sabía que, por su avanzada edad, el cerdo tenía los meses contados. De todos modos el actor puede tener su conciencia tranquila porque a Max no le ha faltado de nada durante su dilatada existencia. Contaba con un servicio especializado que lo atendía permanentemente, veterinario de cabecera e incluso un dietista que, en los últimos días, había comunicado al actor que podía ocurrir lo peor porque Max había perdido el apetito y tenía la mirada vidriosa. Después del sepelio, un periodista impertinente preguntó al astro por la posibilidad de sustituir a Max por otro cerdo joven, lo que provocó la ira de los que lo acompañaban. “¿Pero cómo puede preguntarme eso en este preciso momento?”, respondió Clooney, visiblemente destrozado.

Los residentes de las exquisitas “Lomas de Hollywood” estaban acostumbrados a ver a Max y a su servidumbre, empeñada en evitar que el cerdo olisqueara todo lo que encontraba en su camino, dando largos paseos por la zona y todos, sin excepción, se mostraban ante las cámaras apesadumbrados porque se trataba de un vecino más, bueno y atento, aunque un poco despistado porque siempre gruñía el mismo “oingg, oingg” a todo el que se encontraba en su camino. Max era el único animal que podía entrar en los restaurantes del lugar y salvo en una ocasión, en la que se orinó en los pies de una señora y otra en la que defecó durante un brindis, todos reconocen que su comportamiento era exquisito y que apenas se diferenciaba de los demás comensales de la zona. Para consuelo de Clooney y de los habitantes de Las Lomas de Hollywood, el veterinario de cabecera ha asegurado que Max murió tranquilo, satisfecho, sedado y sin dolor alguno, aunque en la proximidad de la muerte se limitó a gruñir un enigmático “oingg”, muy apagado, que ahora están intentando descifrar, por si se trata de su última voluntad.

De todos modos, como no hay mal que por bien no venga, la muerte de Max ha abierto muchas expectativas, porque a Clooney no le faltan candidatas para cubrir el enorme vacío que el cerdo le ha dejado. A él y a toda la humanidad, descanse en paz.

sábado, 25 de noviembre de 2006

Las consecuencias de Rubalcaba


Con su carita de duendecillo de jardín, el ministro del Interior hace gala de un cinismo a prueba de pistolas “el robo de 350 pistolas por parte de ETA es preocupante y tendrá consecuencias”. ¿Preocupante? ¡Vaya si se lo toman con sosiego! Que unos terroristas con casi mil muertos en su haber roben 350 pistolas, con su correspondiente munición, explosivos y vehículos es algo más que preocupante, sobre todo si, como nos aseguran “estamos inmersos en un proceso de paz sin retroceso”. ¿Para qué habrá robado ETA las pistolas, para qué rearmarse hasta los dientes, para qué colmatar sus arsenales, para qué retomar la cívica práctica del envío de cartas a los empresarios si “el proceso de paz no tiene retroceso”?

A Rubalcaba lo suponemos bien informado de todo este tinglado montado entre el “bobo solemne” y los pistoleros de ETA, pero si a su larga inteligencia no ha llegado todavía las consecuencias que, según afirma”, se derivarán del robo de las pistolas, puede preguntarle a cualquier peatón y lo sacará de dudas: la consecuencia primera, directa y principal es que esas pistolas las quiere ETA para practicar su deporte favorito, que es el tiro en la nuca. ¡Servirán para matar! No han robado rosarios, regaliz ni entradas para visitar el Jardín Botánico. ¿Para qué puede querer un pistolero una pistola y qué es lo que tiene que verificar nuestro singular Gobierno para llegar a la conclusión de que ha sido ETA? ¿No nos fiamos del Gobierno francés, es tonta la policía francesa?

Desde el primer momento en Francia se supo que el robo llevaba el sello de ETA y 48 horas después nos dieron pelos y señas de los autores, con nombre, apellidos y denominación de origen etarra, pero aún así “los hombres de Zapa” siguen verificando la autoría del robo.

“!Oiga, pero si las autoridades francesas ya tienen cerrado el capítulo y lo tienen todo muy claro: ha sido ETA, ciento por ciento, sin ninguna duda!”. Pero la señora vicepresidenta, la más valorada de la política española, mira al periodista con su sonrisa indescifrable y le espeta: “ mire, el Gobierno de España tiene sus propios mecanismos de verificación y estamos en ello”. Es como si no dieran crédito, como si se resistieran a creer que ETA se está cachondeando de ellos y con ellos de toda España. Y mientras el País Vasco vuelve a arder cada fin de semana porque los cachorros etarrines han vuelto a su lucha callejera, mientras los escoltas vuelven a estar en alza, mientras los empresarios vuelven a recibir las amorosas misivas de la banda, “el bobo solemne” y los suyos siguen verificando y hablando del “proceso de paz sin retroceso”.

¿Dónde esta el proceso de paz? Este asunto es tan bochornoso que ni siquiera hay negociación con la banda. Mientras verifican y hasta tanto perfilen “las consecuencias”, esto es una rendición incondicional. Lo que el Gobierno vasco no logró presentando sus propuestas en el Congreso de los Diputados, lo tiene ETA al alcance de la mano por los méritos de sus proezas. Pero mientras el Gobierno verifica de mentirijilla, la que realmente está verificando las consecuencias de tener un “bobo solemne” como presidente del Gobierno es la sociedad española. ¡Aquellas lluvias trajeron estos lodos!

sábado, 18 de noviembre de 2006

Un poco de verdad y mucha mentira


¿Existió alguna vez el monstruo del lago Ness? Desde luego fue bonito mientras la leyenda circuló a sus anchas, pero cuando se comenzó a exagerar, con noticias sensacionalistas, huellas en las orillas, estelas en el agua, fotos e incluso películas, se hizo un rastreo a fondo que sólo sirvió para -qué pena- deshacer la leyenda con un veredicto concluyente: "en el lago Ness no existe ningún monstruo y su fauna es similar a la de cualquier otro lago". Sirvió para eso y para gastar seiscientos millones de dólares. La conclusión y el carpetazo llegaron tras una exploración milimétrica de todo el lago, con submarinos equipados de sónar, radar y la más sofisticada tecnología en búsquedas y rastreos. Junto a la negación de Nessi, llegó también la negación de gigantescas cuevas interiores, interconectadas, que facilitaban al monstruo la huida y aparecer casi al mismo tiempo en dos puntos distantes de la superficie.

Pues como en el lago Ness, en algunos puntos de Extremadura y a cuenta de la mal llamada 'recuperación de la memoria histórica' estamos asistiendo a exageraciones, mezcladas con manipulaciones y fabulaciones de tal calibre que son capaces de situarnos en la orilla de la negación. Y eso es malo, porque en la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica hay gente bien intencionada que trabaja con rigor y cree en lo que hace.

Por ejemplo, se ha dicho y se ha publicado, incluso en la prensa nacional, que "en Mérida ha aparecido la mayor fosa común de Extremadura" y junto a estas noticia, burdamente manipulada, se deja caer otra sobre la existencia de un listado de 1.200 emeritenses desaparecidos durante la Guerra Civil, uniendo las dos noticias en la misma información. ¿Para qué? Es evidente que, aunque literalmente no se decía, lo que se pretendía es que se uniera "mayor fosa común con 1200 desaparecidos". ¿Es que han aparecido 1.200 cuerpos en esa presunta "mayor fosa común de Extremadura"? Puede haber un listado con 1.200 nombres, pero lo que es rotundamente falso es que en Mérida haya aparecido semejante fosa.

O sea, ésto es peor que lo del monstruo del lago Ness, porque, aunque el monstruo sea mentira, al menos es una mentira basada en la existencia real del lago. Aquí, hasta la fecha, no existe ni monstruo ni lago.

El pasado 7 de junio, junto a las tapias del cementerio emeritense, aparecieron unos restos humanos, escasos, fragmentados y calcinados. Se trataba de varias falanges, una esquirla de escápula, otra de diáfisis derecha y un trozo de occipital. También se encontró una hebilla, un trozo de tela y dos fragmentos de casquillos de balas fabricadas en Sevilla, en 1925. Uno de los obreros que participó en la recogida lo resume así: "todo cabía en un calcetín". De mutuo acuerdo las partes implicadas, Ayuntamiento, Consorcio y Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, decidieron encargar la supervisión y el estudio correspondiente a la Sociedad Científica Aranzadi, de San Sebastián. Los miembros de Aranzadi llegaron, hicieron sus sondeos y prospecciones y hallaron ocho fragmentos óseos más.

En total se hicieron 184 excavaciones en el recinto y para completar el estudio señalaron la necesidad de concluirlo con el análisis de un geo-radar, capaz de encontrar la fosa común o los restos óseos que pudieran existir en el lugar. Los de Aranzadi y los del geo-radar hicieron un trabajo minucioso, pero la fosa no ha aparecido. Si para algo ha servido el trabajo hecho, ha sido para descartar la existencia de la fosa en el lugar analizado. ¿De dónde se ha sacado que unos pocos restos, incinerados, supongan "la mayor fosa común de Extremadura"? Del mismo sitio que salió la existencia de Nessi.

Exagerar con estos temas tan dolorosos es sembrar expectativas falsas para los familiares de las víctimas y, además, restar interés y participación a la verdadera recuperación de la Memoria Histórica, porque fabular con asuntos así es "pan para hoy y hambre para mañana". Y resulta vomitiva la instrumentalización política de alguna jeta de granito, con afirmaciones tales como que el Ayuntamiento de Mérida pretende ocultar el hallazgo "echando más paladas de tierra encima de los restos encontrados". La conclusión a la que han llegado los expertos es tan rotunda como la que hicieron los que exploraron el lago Ness: Según Francisco Echeverría, profesor titular de Medicina Legal y Forense y presidente del Departamento de Antropología, "se trata de pequeños fragmentos y esquirlas que se corresponden con más de un individuo (sin poder precisar) y que han experimentado un gran deterioro como consecuencia de la acción del fuego que interpretamos como post mortem y muy probablemente relacionada con labores propias del cementerio en tareas de limpieza (exhumación y reducción de sepulturas).

Teniendo en cuenta la escasa representación de los huesos recogidos y su mal estado de conservación no es posible establecer criterios para orientar su identificación". Esto es lo que hay y todo lo demás es ruido, cohetería y fanfarria o algo peor. Mucho peor.

domingo, 12 de noviembre de 2006

Así se cuenta la historia


Es lamentable que lo que ocurre en la Asamblea de Extremadura esté tan a trasmano de la realidad de la calle y que la calle no entre dentro ni hurgue en un foro que, aunque lo ignore, le cuesta muy caro. La democracia es costosa para el bolsillo del contribuyente, aunque el contribuyente pague y mire para otro lado. Pero lo cierto es que allí, en el Parlamento extremeño, permanece el eco de muchas soflamas tan vacías como oportunistas y, con frecuencia, se ve el desnudo de algunas estrategias bochornosas y denigrantes, porque las hay que yendo como “teresasdecalcuta” redividas, caen en la impudicia de la necrofagia y no tienen inconveniente alguno en montar su perorata sobre mentiras y patrañas, a costa de lo que sea.

Y lo que es en este caso es que, en las cercanías del cementerio de Mérida, el 7 de junio pasado, aparecieron unos restos óseos muy reducidos, calcinados y de escasa representatividad para aportar datos y sacar conclusiones. Se paralizaron de inmediato las obras, se protegió todo el perímetro y llamó a la sociedad científica Aranzadi, la más cualificada para estos temas, para que se hiciera cargo del estudio y evaluación del hallazgo. Los expertos llegaron a Mérida, hicieron su trabajo con la total colaboración del Ayuntamiento, el Consorcio y la Asociación para la recuperación de la Memoria Histórica. Hicieron 184 excavaciones, hasta llegar en todas ellas a “suelo firme”, analizaron los restos encontrados, diez fragmentos en total, a los que se unieron unos cuantos más recogidos, durante la exhaustiva búsqueda. Llegó a Mérida un georádar, tecnología capaz de encontrar restos óseos a gran profundidad y el resultado fue prácticamente el mismo, porque apenas se pudieron encontrar unas cuantas esquirlas más.

¿La conclusión de todo esto? La búsqueda, el estudio y análisis de lo encontrado y del lugar donde estaban los restos concluye en una indefinición absoluta, porque los expertos no se atreven, con tan escasa representatividad a dar un diagnóstico concluyente: “SE TRATA DE PEQUEÑOS FRAGMENTOS Y ESQUIRLAS QUE SE CORRESPONDEN CON MÁS DE UN INDIVIDUO (SIN PODER PRECISAR) Y QUE HAN EXPERIMENTADO UN GRAN DETERIORO COMO CONSECUENCIA DE LA ACCIÓN DEL FUEGO, QUE INTERPRETAMOS COMO POST MORTEN Y MUY PROVABLEMENTE RELACIONADA CON LABORES PROPIAS DEL CEMENTERIO EN TAREAS DE LIMPIEZA (EXHUMACIÓN Y REDUCCIÓN DE SEPULTURAS). TENIENDO EN CUENTA LA ESCASA REPRESENTATIVIDAD DE LOS HUESOS RECOGIDOS Y SU MAL ESTADO DE CONSERVACIÓN NO ES POSIBLE ESTABLECER CRITERIOS PARA ORIENTAR SU IDENTIFICACIÓN”

¿Se puede con todo esto proclamar, afirmar, defender y mantener que “LA APARICION DE UNA FOSA CON LOS RESTOS DE FUSILADOS REPUBLICANOS EN MERIDA POR EL EJÉRCITO DE FRANCO EN EL CEMENTERIO EMERITENSE, LUGAR EN EL CUAL SE PRACTICÓ UN GENOCIDIO SISTEMATIZADO QUE BUSCABA ACABAR CON LA MEMORIA Y LA VIDA DE QUIENES ENCARNABAN LOS IDEALES DE LA II REÚBLICA, NOS VUELVE A SITUAR A LAS FUERZAS POLÍTI CAS EN LA SITUACIÓN DE PROCEDER A LA RECUPERACIÓN MORAL Y POLITICA DE LAS VICTIMAS DEL FRANQUISMO”? ¿No sería más prudente esperar a que la fosa aparezca? ¿Podemos pretender “la recuperación moral y política del las víctimas del franquismo” con patrañas semejantes? ¿No merecen los fusilados, que parece que sí los hubo, un mínimo de respeto? ¿Es lícito ordeñar la mentira para sacar tajada política con asuntos que reabren heridas y despiertan dolor?

¿Se puede caer en la indecencia de afirmar que la corporación emeritense ha pretendido “ECHAR PALADAS DE TIERRA SOBRE LOS RESTOS ENCONTRADOS”?

¿Se puede caer en la demagogia pestilente de solicitar “UN MONUMENTO A LAS VICTIMAS DEL FRANQUISMO FUSILADAS EN LAS TAPIAS DEL CEMENTERIO DE MÉRIDA y rechazar la oferta de “un monumento para todas las victimas y que simbolice el horror de la Guerra Civil y la reconciliación?

Pues todo esto se ha hecho. Y se ha hecho en la Asamblea. Y la que lo hizo, encima, puso cara de palo y se mostró ofendida cuando tuvo que oír que ella se había criado bajo el manto protector del franquismo y que todo lo que había proclamado era un embuste navajero. ¡Cosas que pasan!

sábado, 4 de noviembre de 2006

El notario de Artur Mas


Le habrá llegado a Artur Mas el acta notarial asegurándole que «ahora tampoco»? El candidato de CIU, que necesita un notario incluso para estornudar, parece que anda en un sin vivir desde que comenzó a tejerse la alianza entre socialistas, comunistas y republicanos separatistas. El hombre se queja porque después de pasar muchas horas zurciendo el Estatut con Zapatero, después de apoyar al PSOE para que salieran a flote los Presupuestos Generales del Estado, después de hacer guiños y carantoñas a los republicanos y de demostrar su ala progresista certificando ante notario que con el PP ni a recoger monedas de oro, pues le dan portazo y lo dejan, otra vez, colgado de la brocha. Son cosas de la política, son cosas de los políticos.

En una ocasión anterior, Maragall fue el candidato más votado en Cataluña, pero por la distribución provincial del reparto de escaños resultó Pujol el ganador de las elecciones. ¿Puede perder el más votado? Así fue, porque las matemáticas electorales tienen poco de ciencia y mucho de conveniencia. El resultado de aquel disparate llegó dos legislaturas después porque, aprendida la lección, Maragall se pasó al chalaneo con los republicanos y si cuando ganó perdió, cuando perdió ganó. El delfín de Pujol, Artur Mas, que incluso había sido investido sucesor antes de presentarse a las elecciones, probó también la medicina de ganar y quedarse en puertas, porque la suma de socialistas, republicanos y comunistas superaba su soledad.

Como se recordará, se formó un tripartito disparatado, incoherente, ingobernable y desvergonzado porque resultó que los republicanos de Carod Rovira, que se sienten incómodos en España, eran los que sostenían al gobierno de España y al PSOE en Cataluña y en Madrid, quitándole la cartera a los nacionalistas catalanes de CIU. Fruto de estos encamados extraños surgió el Estatut, en el que los republicanos se volcaron para aprovechar la ocasión que les brindaba un gobierno de España débil y en sus manos. Pero como en política la deslealtad es mandamiento universal, a la hora de la verdad los proponentes del Estatut votaron contra el Estatut, porque Zapatero saltó de la cama republicana a la de los convergentes, que andaban agazapados esperando momento y ocasión para desplazar el protagonismo sobredimensionado de un partido como ERC, con más lengua que diputados.

Artur Mas aprendió que ganando también se pierde al mismo tiempo que Maragall aprendía que perdiendo también se gana, e inició una reconversión en sus estrategias haciendo más guiños que un catador de vinagre. El primero, el más estúpido pero también el más solemne, fue servir en bandeja de notario la cabeza del PP para convencer a Zapatero de que ellos, los de CIU, jamás se alinearían con los adversarios del PSOE, y para ratificar el propósito se pusieron a disposición del Gobierno, prestándole apoyo en cuantas iniciativas presentaba, para de forma vergonzante demostrarle que no necesitaban a ERC, porque ya estaban ellos.

Pero llegan las elecciones y, otra vez, corregido y aumentado, los que más votos y escaños pierden, PSC y ERC, interpretan que el electorado ha dejado de votarlos para que acaben gobernando y, otra vez, con absoluta naturalidad, entienden que en Cataluña el que ha ganado debe quedarse en la oposición. Como la alianza CiU- PSC no les convenía a los socialistas porque hubieran tenido que ceder la presidencia a Artur Mas, dejan al que habían cogido y cogen al que habían dejado, repescando de nuevo a Rovira y «qué lástima, pero adiós» dando portazo a CiU, a Artur Mas y a su notario. Y volver a empezar, porque ayer mismo los de CiU comenzaron a votar contra las iniciativas del PSOE en el Congreso y los de ERC han vuelto al redil de las buenas componendas. ¿El paso siguiente? Lo más normal es que los de CiU le envíen a Artur Mas al notario de cabecera para que le comunique que su tiempo ha pasado, que así no se puede seguir y que los pasos que ha dado y las confianzas que ha depositado los ha llevado a un callejón sin salida.

¿Qué diría Cataluña si Cataluña pudiera decir algo? La propuesta de Ibarra de establecer "la segunda vuelta" para que la democracia se vea reflejada en el resultado, lo pondría todo en manos del electorado. ¿Lo aceptaría Montilla? ¿Ja, ja y ja!

sábado, 28 de octubre de 2006

Fumar, asunto testicular



En algunas dependencias de la Asamblea de Extremadura se fuma porque hay fumadores, esencialmente fumadoras, que se saltan la Ley y los derechos de los demás según les venga en gana o en necesidad. Para ellas no hay restricciones porque siguen fumando como siempre, siguen atosigando a los demás como siempre y, lo más gracioso, siguen mirando con cara extraña al que les recrimina que no respeten nada y se salten leyes y derechos. Están tan persuadidas de que el mundo comienza y termina en sus ombligos, que les importa muy poco molestar, dañar y saltarse una ley buena, aunque tardía y mojigata ¿Cuál es la solución? Pues están violentando tanto que algunos, como es mi caso, nos estamos pensando muy seriamente la posibilidad de denunciar estas situaciones, con nombre y apellidos, a las autoridades sanitarias, a pesar de lo que conlleva y duele señalar con el dedo índice a unas compañeras diputadas. Estas señoras parecen ignorar que los que no nos hemos callado, ni por conveniencia, delante del general, no nos vamos a callar gratuitamente por que lo quiera un cabo. O una caba.

Somos muchos los que nos consideramos víctimas del tabaco, porque durante toda nuestra vida se nos ha obligado a ser fumadores pasivos que, para paliar en lo posible los efectos nocivos de un vicio que no es el nuestro, hemos tenido que prescindir de celebraciones colectivas y levantarnos de muchas reuniones importantes, incapaces de soportar tanto humo y tanta pestilencia. Procuramos desaparecer de puntillas a la hora de la cervecita, no acudimos a actos en los que sabemos que se nos va a atosigar con malos humos, nos disculpamos con bobadas para no estar donde los fumadores, sobre todos fumadoras, van a desplegar sus encantos oloríficos y difícilmente llegamos a los postres cuando la presencia es obligada. La Ley Antitabaco vino a remediar un poco, sólo un poco, esta situación, pero ahora tendremos que apelar a sus consecuencias punitivas porque algunos fumadores, afortunadamente menos, creen que las leyes nos les afectan y que se escriben y aprueban para pasar el rato.

Por todo esto no se entiende que una mujer sensata, como es Esperanza Aguirre, la presidenta de la Comunidad de Madrid, intente burlar el espíritu y la filosofía de la Ley con decretos dulzones, para facilitar a los fumadores la penosa tarea de seguir pisoteando los derechos de los demás. ¿Hay que poner “peros” porque la Ley es socialista, haciendo guiños electorales a los reyes y reyas del humo? Pues a mi me parece una gilipollez, sea la ocurrencia de la señora Aguirre, de Agamenón o de su porquero.

sábado, 21 de octubre de 2006

Según Ibarra



Todavía puede verse en vivo, aunque no en directo, la última intervención de Ibarra en la Asamblea de Extremadura. El que quiera puede entrar en las páginas de la Asamblea y siguiendo las indicaciones pertinentes dar con la última perla. Pero el que desee analizarlas que, por el mismo procedimiento, busque en el Diario de Sesiones la del día 26 de octubre y allí las tiene, literales. Para el que no quiera molestarse yo relato, de la mejor manera posible, lo que allí pudimos oír, aunque son más fiables los procedimientos anteriores, porque yo no soy precisamente un notario. De todos modos, viendo su evolución, yo cada día me divierto más con sus genialidades. Vamos al grano.

-Ibarra dijo que en la Tierra de Barros hay mucha contaminación porque los propietarios de vides sulfatan los frutos y que por eso tienen que llevar mascarillas. Después de invertir más de 600.000 millones de pesetas para lograr lo que ahora tenemos, Ibarra lo contamina, lo sulfata y tira de la cadena.
-Ibarra aseguró que a él no le gustan las centrales térmicas y que su implantación en Extremadura viene impuesta directamente desde el Ministerio de Cristina Narbona, “si, esa señora que atiende tan bien a los de “Refinería NO”. Lleva 25 años asegurando su absoluta independencia y en apenas tres meses ya nos ha dicho que el vota por disciplina de partido y, ahora, que es Cristina Carbona la manigera de las térmicas. El se traga todo lo que llega y parece que no tiene otra solución.

-Ibarra afirmó que la reforma de la OCD del vino que se prepara en la UE, acabará arrancando nuestros viñeros. Según dijo, el viticultor vive de las subvenciones de la UE, porque el 90% de la producción se dedica para la destilación de alcohol, que está subvencionada. Y con su lógica parvularia sentencia el futuro de los viñedos porque “al faltar subvención” los propietarios se darán codazos para arrancarlos, porque eso si estará subvencionado.

-Y finalmente, lo más desternillante, acusó a los que se oponen a sus proyectos de estar detrás del “gran capital” Vamos, una especie de sicarios a sueldo de los. ricachos de siempre, que han estado explotando a los jornaleros con mano de obra barata y que ahora ven peligrar el negocio con industrias que generan mucho empleo.

-¿Más cosas? Se autodefinió como “un triunfador inteligente”, al mismo tiempo que tildó a toda la oposición de zafia, incoherente y sin escrúpulos.

Yo creo que antes de volver a las aulas, debería ingresarse un par de años en una clínica de desintoxicación. En él tienen los siquiatras para muchas tesis doctorales.

sábado, 14 de octubre de 2006

Una familia como otra cualquiera


Todo es normalito y en expresión de algunos cocineros autodenominados “expertos de Moncloa”, la familia real es una familia como otra cualquiera. Incluso esa feliz expresión también la ha utilizado el Gobierno a la hora de felicitar/felicitarse por el anuncio del octavo nietecillo/a real, que llegará por mayo. Verdad indiscutible. Es tan normal que por eso al anunciarse el embarazo de la esposa de Felipe de Borbón, la prensa ha sido unánime y le dedicó portada y varias páginas en el interior. La noticia abrió todos los informativos en radio y televisión y tertulias y tertulianos se han vestido de gala para comentar desde las ojeras hasta los estornudos de la feliz mamá. Es una familia como otra cualquiera y por eso lo que llegue llegará como su hermanita, en una planta reservada de una prestigiosa clínica privada y lejos de la amalgama de la sanidad pública. Fíjense si es normal que cuando apenas es un germen de dos meses, ya ocupa lugar en el cotilleo nacional, recibe el sobrenombre de “alteza” y si la criatura es un varón, entra en disputa constitucional con su hermana, a la que respetuosamente llaman “doña Leonor” y que ya tiene su club de fans, los “leonoristas”, encabezado por Boris Izaguirre.

Es una familia como otra cualquiera, es decir, con penurias económicas, dificultades para llegar a final de mes y apuntada en listado para tener acceso, si la suerte acompaña, a una vivienda social de esas de 60.000 euros. Tan normalita que, como ya ocurrió con su papá, sin ser ninguna lumbrera, hasta pueden hacer tres carreras universitarias al galope y colgar en la cuna, junto al sonajero, los entorchados de Jefe de la Fuerzas Armadas. Pueden pasar de la moqueta a la alfombra, con coche, avión y yate en perfecto estado de revista, pero, como bien se sabe, eso también está al alcance de todas las familias españolas. Y como ha pasado este año, también pueden concluir sus vacaciones a finales de agosto y andar de regatas a primero de septiembre. El asunto es tan, tan, tan normalito que parece que la mamá incluso va a pasar por el trance engorroso de nueve meses de embarazo y hasta puede que con algún vómito incluido, porque la naturaleza no respeta reales pamplinas. Como todas las mamás, tendrá una equipo médico al su alrededor y cada latido de la criaturita será analizado, medido, comparado y sopesado. O sea, como ocurre con todos los demás.

Y para no separarse del mundanal ruido, SSMM los Reyes brindarán con sidra el día que, tras una dura competición, los nietecillos logren la categoría de funcionarios en alguna comunidad autónoma, en algún ayuntamiento o se coloquen en un banco o en una gasolinera. Decía Rosthill que “la igualdad se mide por la ausencia de privilegios” y en este sentido hemos de reconocer que privilegios ni uno. Como bien se dice, la Casa Real es igualita a la casa de mi vecino, una familia como otra cualquiera.

sábado, 7 de octubre de 2006

Hoja de calendario


Tengo un amigo que está empeñado en torcerle el brazo al tiempo y el tiempo, claro, se ríe de mi amigo y de sus acelerones. Cada día tiene veinticuatro horas y aunque Lucho Gatica suplique al reloj que no marque las horas, minuto a minutos las horas pasan y hagamos lo que hagamos caen imperturbables las hojas del calendario. En el huevo está el ave, pero necesita la caricia del tiempo, que es el que obra la transformación y opera el milagro de la vida. Por mucho afán que pongamos, la semilla necesita tiempo para germinar, tiempo para hacerse árbol, tiempo para ofertar el fruto que, además, lo dará a su tiempo. El tiempo doblega la espalda del gigante, cubre de musgo la fachada de piedra y muerde el acero más templado.

No es ninguna frase retórica “dar tiempo al tiempo”, porque lo que no resolvemos nosotros nos lo resuelve el tiempo, a veces en poco tiempo, porque sabe dominar la espera y establecer los aguardos. El tiempo derriba muros, abre puertas y ventanas, cierra la espera y la herida, desmiente fidelidades y promesas olvidadas y sigue su camino imperturbable, indiferente, frío y dominante. El tiempo tiene todo el tiempo y por eso no se precipita ni adelanta acontecimientos. Mi amigo se confunde al querer acelerarlo y lo más sensato es que se rinda y acomode su paso al paso del tiempo.

El tiempo es sabio y presta sabiduría al que lo sigue de forma sosegada, huyendo de las precipitaciones. ¿Cuanto tiempo necesitó la piedra para ser piedra? Cuando al feto le falta tiempo el resultado es un aborto. El tiempo nos lleva, nos nace, nos crece, nos envejece y lo hace a su paso, sin acelerarse, sin alterar su ritmo. A su tiempo...

Si mi amigo supiera ver lo inútil de su empeño, concluiría por sosegarse y abandonaría su estrafalaria lucha por dominar lo que nos domina. Si supiera esperar y darse tiempo, el tiempo lo gratificaría con la pomada balsámica del tiempo y mi amigo volvería a sonreír. A tiempo.

sábado, 30 de septiembre de 2006

¿Alianza de religiones?


Fue don bobo solemne el que en uno de sus arranques patológicos propuso algo tan pomposo como una “alianza de civilizaciones”. Aquello no era nada y de la nada nada sale, pero el corifeo se encarga de sostenerlo a base de gorgoritos interesados, en medio de esta escenificación en la que el Estado de Derecho se postra ante los pistoleros, casi para pedirles perdón por no haber escuchado antes sus exigencias. Por eso la vicepresidenta de la cosa, con su cara de palo, sentenció aquello de “en el proceso de paz no puede haber vencedores ni vencidos”. La muy llama proceso de paz a este bochornoso proceso de rendición.

Bueno, pues después de aquello de la “alianza de civilizaciones”, que mereció incluso debate de sesudos apesebrados, ahora llega Ibarra y acostumbrado como está a mear más lejos, corrige al bobo y modifica su propuesta, porque según su sabio entender, lo que se necesita es una “alianza de religiones”. ¿Para qué? Pues nuestro hombre de estado lo justifica así: “deberían reunirse todos los representantes de las religiones monoteístas para decirnos que todas son verdad o que todas son mentira. Si son verdad, no merece la pena que nos peleemos y si son mentira nadie va a ser tan tonto como para luchar por una cosa que no es verdad” ¿Qué eso es una patochada? Las explicaciones al maestro armero, aunque no faltarán intentos de elaborar incluso tratados filosóficos con semejante parida. Ya escribí un día que Ibarra necesita traductores.

Lo peor de Ibarra es que nunca soportó a su lado a nadie que lo viera desnudo y se lo dijera. Él siempre se rodeo de perritos cabezones, de aquellos que movían la cabeza cuando el coche cogía un bache y claro, con tanto aplauso comprado ha llegado a creerse un ser superior, olvidando lo que en su subconsciente está grabado con sangre desde nacimiento. ¿?. Debería hacerse una introspección psicológica, porque seguro que le ayudaría a recobrar sentido y realidad. Pero como se tiene miedo no lo hace y por eso va por la vida repartiendo soluciones que dejan en pañales a los inventos del TBO, porque hay nada más patético que un pobre hombre metido a redentor. Ya propuso para acabar con ETA que en el País Vasco entrara la OTAN, que se pactara, que se les diera un ultimátum, que se les encarcelara de por vida… Y ahora, como se siente crecido y maestrillo, ya incluso apunta soluciones para el terrorismo internacional. De ahí lo de la “alianza de religiones”, que es la misma parida del bobo, pero llevada al terreno de la mística. Acabará levitando.

sábado, 23 de septiembre de 2006

Matan moscas con el rabo


No le hago ascos a la república. Soy hijo de republicano, encarcelado por sus ideas y represaliado durante toda la etapa franquista, que no fue corta ni parca en gestos de desdén hacia los que no entraban en su círculo y de eso tampoco se escapaba la familia. Vamos, para que se me entienda, Franco perseguía a los de la orilla opuesta con el mismo afán que lo hace Ibarra hoy, con lo que se da la paradoja de que algunos apenas hemos notado la diferencia porque nos persiguió aquel y nos persigue este. La diferencia más sustancial es que Ibarra no nos puede encarcelar ni ordenar paseíllos en la madrugada y que aquel duró cuarenta años y este SÓLO lleva veinticuatro. Por lo demás, dictador aquel y dictadorcillo este. Ególatra aquel y ególatra este.

Franco se rodeó de una camarilla pringosa, que superaba los excesos del dictador e Ibarra, más de lo mismo, también ha seguido estos pasos y anda con una guardia pretoriana, asfixiante y nauseabunda, encargada de lapidar a los “malos”, que en muchos casos, somos los mismos. O sea, que se dejen de cuentos los idealistas de tienda cien, que protegen y alientan estas prácticas. Unos por acción directa y otros por vergonzosa omisión, están amparando una dictadura y escenificando un amago de democracia. Está visto que a muchos sólo nos queda el consuelo de canturrear aquello de “ni contigo ni sin ti tienen mis males remedio”.

Bueno, pues resulta que con la que está cayendo, con la que se nos viene encima a los extremeños, que acabaremos por arrancar también nuestros viñedos, en el Parlamento Europeo se entretienen con la gilipollez de censurar, setenta años después, la dictadura de Franco. Es seguro, gracias a Dios, que la inmensa mayoría de los eurodiputados no tenga ni la más remota idea del personaje, que Franco no ha ocupado ni un segundo en sus vidas, pero cuando se ponen a hacer el gilipollas, pies para qué os quiero. En casi todos los países europeos tuvieron su “franco” temporal, pero a ninguno se le ocurre dilapidar tiempo y dinero en andar con condenas semejantes. ¿Por qué lo han hecho? Mi abuela decía que cuando el diablo no tiene nada que hacer, se entretiene matando moscas con el rabo.

¿Y qué dicen de semejante condena, setenta años después, los miles de franquistas acérrimos que ahora ramonean en el PSOE? Pues igual que justificaron la dictadura de Franco, justificaron los crímenes de estado y el latrocinio de la etapa felipista. Y de la misma manera, justifican ahora la venta por parcelas autonómicas que está haciendo el bobo solemne. ¡Es la suerte de haber nacido hombre-estómago!

sábado, 16 de septiembre de 2006

Pamplinas a gogó


Por higiene mental no suelo responder a las pamplinas de bobos y bobas, que se asoman a cualquier cosa para dejar sobre ella “la cagadita de la mosca”, pero en esta ocasión la excepción confirma y justifica la regla, porque las pamplinas afectan al Ayuntamiento de Mérida y eso no lo puedo consentir. Resulta que hace apenas una semana, en Mérida han celebrado su XXV Feria del Libro y resulta que, entre otros muchos, en esta ocasión, yo mismo he participado con un libro de relatos, CUENTOS EN VERDE ACEITUNA. La presentación, profunda y muy cuidada, la hizo Luis Maria González Méndez y la personal, amigable y generosa, fue de Fernando Molina, concejal del Cultural. Hasta aquí todo normal, pero al tema se le pretende dar un sesgo torticero, que considero conveniente cortar de raíz. Al grano:

Yo estoy agradecido al Ayuntamiento de Mérida por haberme hecho un hueco en la programación de la Feria y me siento muy satisfecho por haber podido presentar una obra mía en Mérida. Agradezco también la acogida amable que me propiciaron los organizadores y, sobre todo, estoy agradecido, muy agradecido, a los emeritenses que llenaron aquel día la carpa de presentaciones y que se acercaron para que les firmara el libro, pero esos son todos los motivos para agradecer y esos son todos los agradecimientos. Yo no cobre absolutamente nada y tanto el editor de mi obra como yo mismo, fuimos con nuestros propios medios. Ni cenas, ni gastos de hotel, ni minutas abultadas, ni pagos extraños, ni costosos regalos… ¡a no ser que se refieran a un CD conmemorativo de la XXV edición, que me regaló Pilar Vargas! El único gasto extra que recuerdo fue el consumo de un botellín de agua mineral que, por cierto, compartí con Fernando Molina. (¿lo pagamos a medias, querido Fernando?) O sea, pamplinas, mala baba de los que creen que todos somos como ellos y, como ellos, andamos en la corruptela y a la caza del euro desprevenido. ¡Otros son los vientos que a mi me mueven!

Algunos, ese es mi caso, hemos sido apuntados en el listado de los malditos, de los irredentos, de los que no tienen solución y eso supone estar en el extrarradio de las instituciones gobernadas por los socialistas. Ni Junta, ni diputaciones, ni ayuntamientos, ni cajas, ni, ni, ni, ni… Para nosotros no hay agua, pan, ni sal. Para nosotros no hay perdón ni comprensión y jamás, por nada ni por nadie podremos entrar en el olimpo del ibarrismo galopante. Y es que a algunos se nos dan muy mal los ismos y después de haber soportado el franquismo, muchos de los que los disfrutaron, ahora nos imponen el ismo del fulanismo y del ibarrismo, que aún es peor, porque parte de una raíz democrática. ¿También quieren prohibirnos presentar nuestras cosas en ayuntamientos que no galopan con el sello del “ismo”? ¡Si por ellos fuera ya nos habrían echado de España! De la España que quede tras el bobo solemne.

sábado, 9 de septiembre de 2006

ETA se recupera


Es evidente que Zapatero y todos sus cómplices están dando un respiro a ETA. El de la sonrisa hueca por acción y los demás por omisión, seguidismo o disciplina de partido, se han propuesto apuntalar la casi desmantelada estructura del edificio de los terroristas y ETA ya se permite salir a la palestra para exigir "el cumplimiento de los acuerdos con el Gobierno". Está demostrado, porque lo obvio, obvio es, que la lucha callejera se ha incrementado, que los terroristas siguen remitiendo cartas de extorsión y que la banda no ha dejado de acumular ingresos, pero Zapatero dice que aún no lo tiene claro, que sigue analizando si ETA ha cesado en su agresión permanente al Estado español y que "el proceso de paz" camina por buen sendero.

Hoy, sólo los muy cegatos o los plegados a la más repugnante disciplina de partido, ponen en duda la rendición del Gobierno de España ante los extorsionadores y asesinos de ETA. Zapatero, esa amenaza extraña surgida de las mochilas del 11-M, se está definiendo como un ser sin principios, conciencia, ética y moral, impulsado por ideas que no entran en la conciencia colectiva, aunque los de la disciplina y el "poderoso caballero es don dinero" logren barnizar sus extraño comportamiento. A la hora de pedir responsabilidades sobre lo que está ocurriendo, sobre el espectáculo bochornoso que España está ofreciendo, habremos de ir mucho más allá de Zapatero, porque son muchos los que, soñando con moqueta o para seguir en ella, están chapoteando en la ciénaga de esa desagracia boba y solemne que para sonrojo de todos ocupa nada menos que la presidencia del Gobierno de España. ¿Cuáles son los compromisos que ETA reclama al Gobierno? ¿Por qué se reúnen los socialistas vascos con la banda de Otegui? ¿Por qué dice Otegui que detener a miembros de ETA o colaboradores, es entorpecer el proceso de paz acordado con el Gobierno? ¿Por qué ha bajado la acción policial y prácticamente no ha habido terroristas detenidos en el último año? ¿Por qué el Fiscal General se muestra tan comprensivo y magnánimo con las acciones y reuniones de un clan como el de Batasuna? Todas estas respuestas debería responderlas el Gobierno, porque aunque no estemos por la labor de creer nada de lo que venga de ETA, Otegui, Batasuna y demás alimañas, hay datos que señalan que los acuerdos con la banda están más avanzados de lo que dicen.

Ahora sale Zapatero con el artificio de pedir autorización al Congreso para iniciar la negociación, buscando así una legitimidad a la rendición que no puede darle ni el Congreso, ni el Senado, porque ¿en qué programa electoral se recogía que en esta guerra sucia de pistolas contra nucas indefensas, España habría de plegarse del lado de los pistoleros? La actitud de Txapote, riéndose de la familia de Miguel Angel Blanco y despreciando al tribunal que los juzga por la heroicidad de haber disparado en la cabeza y por la espalda al concejal de Ermua, es la mejor muestra del arrepentimiento de estos desalmados que están desarmando a nuestro Estado de Derecho.

ETA se recupera porque alguien le da óxigeno. Todos sabemos quien. Todos sabemos quienes.

sábado, 2 de septiembre de 2006

Ibarra necesita traductores

Sabíamos que tras el debate de la pasada semana, el PSOE/Junta de Extremadura, saldría apresuradamente a la palestra para "traducir" a Ibarra y, sobre todo, para barnizar la evidencia de que tras 24 años de ordeno y mando está desconectado de la realidad, más confundido que Dinio y muy pasado de rosca en juicios y apreciaciones. Puntual a la esperada "traducción" llega la portavoz socialista, Dolores Pallero que, pese a ejercer como tal, cobra como consejera de la Junta de Extremadura. Es decir, que a la portavoz del PSOE, le pagamos el sueldo todos los extremeños, evidenciándose otra vez que, después de tantos años, confunden lo público con lo privado y el partido con la institución.

Para los socialistas la Junta es un brazo más del PSOE y si alguien lo duda, sólo tiene que leer la bochornosa argumentación de la portavoz de la Junta y del PSOE. Tienen tan oxidadas las razones democráticas que ni siquiera disimulan, porque para ellos Ibarra, Junta y PSOE es lo mismo y no se percatan de que la Junta es cosa de todos. ¿Dos por el precio de una? ¡Qué vergüenza! Está claro que han perdido toda capacidad de sonrojo.

Bueno, pues el debate fue lo que fue, fue visto, fue oído, está publicado, analizado y comentado, por lo que la valoración de la portavoz socialista y otros "istas", no puede desvirtuar ni enmascarar la evidencia de que a estas alturas Rodriguez Ibarra no cree en Rodríguez Ibarra, no cree en el PSOE, no cree en Extremadura y la única creencia que le queda es el poder de la Junta. Un poder que le sirve para castigar y premiar y para ponerle sueldo a gentes como la señora Pallero, afines y aledaños. Allí, en la tribuna de la Asamblea, lo que se vio fue una soberbia irredenta y sin capacidad de retorno a una realidad tozuda, empeñada en desmentir la Extremadura idílica que se empeñan en presentarnos. Ibarra ya incluso habla en primera persona, se cita, se besa, se felicita y se presenta así mismo como a un mesías que está resolviendo "los agravios que Extremadura sufrió durante los últimos 200 años bajo el dominio del PP". Por ignorar incluso ignora que es él el que lleva 24 años machacando las posibilidades de Extremadura y que el PP no ha gobernado en Extremadura ni un solo día. ¿Qué puede esperarse de alguien con semejante sentido de la orientación? La portavoz socialista no nos lo dice, pero se deduce de su apresurada loa que aquello acabó mal y que Ibarra necesita traductores para hacer más digeribles sus desvaríos.Extremadura, después de 24 años de "ibarrismo", es la Comunidad más pobre y atrasada de España. Seguimos con la menor RPC y con la mayor tasa de paro, pese a los múltiples planes a favor del empleo, que sólo han servido para sentenciar el fracaso de unas políticas sin rumbo, erráticas y tan populistas como casposas.

Mientras las demás comunidades se desperezan, buscando soluciones, aquí seguimos sesteando, anclados, a medio camino entre Evo Morales y Hugo Chávez. Mucha palabrería hueca, mucho lío, mucha pelea callejera y pocas realidades, es el legado de Ibarra, pese a la confianza en él depositada y pese a ser hoy el responsable autonómico más antiguo de Europa. No hay que descartar que el próximo año nos proponga festejar los "25 años de paz". ¿Cómo puede dedicar su intervención a los jóvenes, quien es el responsable directo de que salgan de Extremadura 7000 jóvenes al año? Lo oirán desde fuera, porque en Extremadura se forman, pero el cobijo laboral lo tienen que buscar en otras comunidades en las que se habla menos, se pontifica menos, se riñe menos, se gasta menos en banalidades y se hace más.

La portavoz del PSOE y consejera Portavoz de la Junta de Extremadura, llama a estas evidencias "victimismo, derrotismo y catastrofismo", evidenciando así el divorcio entre la cerrazón y la realidad, porque, una vez más, se demuestra que no hay ciego más ciego que el que no quiere ver. Como justificación de todo, se nos dice que crecemos más que la media, pero no nos dicen que si mantenemos este crecimiento "espectacular", Extremadura alcanzará la media española aproximadamente dentro de 83 años, aunque estamos seguros de que será mucho antes, porque "hay señales que alumbran que la siesta se acaba".

También se enfatiza en el número de ordenadores por aula y con la bibliotecas municipales, donde ocupamos la cabecera, pero se callan que somos la Comunidad con menos acceso a Internet y la que menos lee de toda España. Carlos Floriano lo tuvo muy fácil, porque frente a la estridencia de los inventos del TBO, puso la evidencia incontestable de la realidad. Una realidad que suele llegar de los propios datos del gobierno de Zapatero, de los propios datos de la Junta y del conocimiento de la realidad de Extremadura. Así es que si Ibarra necesita traductores, debe buscarse a alguien más alejada de las soflamas oficialistas y que domine mejor el lenguaje de la verdad. La bien pagada portavoz, ha vuelto a suspender.

sábado, 26 de agosto de 2006

Me llamo Carlitos



Me llamo Carlitos, tengo un año recién cumplido y desde mi nacimiento he permanecido hospitalizado. De mis padres, por mis circunstancias o por las suyas, nada sé y ellos, por sus circunstancias o por las mías, tampoco saben nada de mi. Nací y se olvidaron, nací y me olvidé porque nunca pude recordarlos. Padezco el síndrome de Down, además de otra patología en el corazón, de la que he sido intervenido. También sufro hipotiroidismo y una dolencia similar en el colon. Nada más.

Mi mundo puede parecer pequeño, pero he recorrido mucho cielo en los brazos de cuidadores enfermeras y pediatras, que me han protegido, que me han mimado y me han hecho feliz. Si quieres ver mi sonrisa y mis ojos de sorpresa, sólo tienes que asomarte a marco de mi cuna, sonreír o hacerme una carantoña. Y si quieres cogerme siempre estoy dispuesto, siempre vigilante, por si alguien me acerca unos brazos que me rescaten del aburrimiento de la cuna. Hace pocos días fue mi cumpleaños y me vistieron para la ocasión, me peinaron y me organizaron la primera gran fiesta de mi vida. Aunque mi dieta es muy rigurosa y no puedo comer dulces, hasta tuve tarta, con su velita encendida… Y, lo más importante, pasé de unos brazos a otros y volé, volé y volé, hasta quedar agotado y rendido de placer. ¿Se puede pedir más?

Durante este año, varios matrimonios fueron a conocerme, con la idea de adoptarme, pero las dificultades de mi situación son más grandes que el amor que llevaban y después de unas sonrisas y unas caricias, ellos se fueron y yo me quedé. No me quejo ni les culpo porque, además del síndrome que padezco, mi corazón y mi colon exigen cuidados permanentes durante al menos dos años más. Y eso es mucho tiempo, aunque a mí este primer año se me ha pasado enseguida e incluso he aprendido a decir “ya tá”. Lo cogí de las enfermeras, que después de dilatarme el colon para curarme, con mucha penalidad para mí, siempre decían “ya está, Carlitos”. Ahora, cada vez que acaban su trabajo, yo me adelanto y me consuelo con el “ya tá”. Y soy feliz, porque sé que tras esos momentos de dificultad vienen los brazos, los abrazos, las caricias y el mimo. Después de todo ya estoy acostumbrado al dolor y sólo son unos minutos al día.

Ahora mi mundo me lo van a trastocar, porque por normas que no conozco, aunque tenga que volver al hospital cada día, me van a llevar a un centro de acogida, a la espera de que alguien quiera dedicarme parte de su vida, pero mi situación es tan difícil y comprometida que no sé si llegará, aunque sigo soñando con ángeles. Incluso parece que paso a depender de un juez, al que no conozco, al que no he visto y que nunca me ha tendido los brazos para sacarme de la cuna, pero estoy en sus manos. Cambio de sitio, cambio de cuna, cambio de caras, de ese trozo de techo que tengo tan medido y cambio de brazos, porque las enfermeras y las pediatras, que tan feliz me han hecho, se quedan y yo me voy. Me voy con mi síndrome, el corazón roto y el colon afectado. Me voy no sé dónde, ni porqué, ni para qué. Me voy porque me llevan y si pudiera diría “ya tá”, pero no lo van a entender.

sábado, 19 de agosto de 2006

Fe ciega y disciplina



La fe ciega tiene poca relación con el raciocinio y la inteligencia. Vázquez Montalbán aseguraba no entender a los que profesan "fe ciega" en algo, por lo que eso conlleva de renuncia al análisis, que es una facultad de la inteligencia. Yo, en mi pequeñez, coincido con el autor de "Los mares del sur" porque nunca he tenido "fe ciega" en nada ni en nadie, ni siquiera en mi mismo. Comulgar con ruedas de molino no es lo mío y por eso, sin situarme entre los socráticos, suelo aplicar una mano de racionalidad a cualquier propuesta que se me haga. De todos modos, Stendhal, distinguía entre "fe de fe" y "fe de conveniencia", que es la más común. Sobre todo es la más común entre los que, por proximidad o conveniencia, además de tener "fe ciega" en Zapatero, nos exigen a los demás que también entremos en la madriguera de la estulticia. ¿Mal de muchos, consuelo de tontos? Algo así. Como ellos tienen mala conciencia, pretenden extenderla para que quede mitigada. En "Los cuentos peregrinos", García Márquez pone en boca de uno de sus personajes: "Si todas somos putas ¿dónde está la diferencia?"

Ahora resulta que hay que seguir por fidelidad, decencia política y patriotismo las consignas del Zapatero. Unos por "fe ciega" y los demás por disciplina de partido. Y el razonamiento es que es Zapatero, como presidente del Gobierno, el que tiene que marcar la política antiterrorista y todos los demás debemos hacer dejación de nuestro criterio, de nuestra razón e incluso de nuestros escrúpulos morales, porque al presidente del Gobierno hemos de profesarle "fe ciega" y le debemos aplaudir cualquier eructo. ¡Vaya gilipollez! Me encuentro entre los pocos amigos reconocidos y reconocibles de Adolfo Suárez, estuve a su lado siempre, con él fundé y con él me estrellé en el CDS, pero Adolfo Suárez, que me llamaba "Martín, El empecinado" contó mi lealtad y mi fidelidad, pero siempre supo que mi fe, además de relativa, nunca llegaría al paroxismo de "ciega". ¿Por patriotismo debo regalarle a Zapatero lo que nunca puse a disposición de Adolfo Suárez? Hace falta ser necio de capirote para mantener semejante exigencia.

Pero puestos a pecar y como yo no me quedo en medias tintas, voy a caer en el sacrilegio de afirmar que de Zapatero no me creo nada, que me parece un mal mayor, que creo que carece de escrúpulos, de entidad política, de moral ciudadana y de vergüenza. Desde su origen, y al margen de lo que pueda decir Rajoy, lo siento deslegitimado, porque aunque no sea políticamente correcto, creo que está donde está por un atentado terrorista, por un montón de muertos y por la campaña electoral más tramposa de nuestra historia. Zapatero ha demostrado carecer de escrúpulos. Zapatero me parece débil, zalamero y vendepatria. Si por él fuera vendería España por parcelas autonómicas, sin un parpadeo, sin un sólo remordimiento y sin el sentimiento de haber cogido un país entero y haberlo descuartizado para poder mantenerse donde los pusieron las bombas. ¿Más para los gilis de la "fe ciega"? Sacar a pasear la nauseabunda razón de "la disciplina de partido" para votar contra lo que uno piensa y representa, es una inmoralidad que supera incluso a la "fe ciega". ¡Que suerte tienen algunos, al disponer de una conciencia tan ancha y acomodaticia!

sábado, 12 de agosto de 2006

De profesión, progresista


Como es verdad que “a río revuelto, ganancia de pescadores”, todos/as las que no han hecho en la vida absolutamente nada de provecho, de la noche a la mañana pueden colocar un cartel en su casa: “PROGRESISTA” y comenzar a ejercer la profesión que, con mucha jeta y unas siglas detrás, hasta resulta lucrativa. ¿Cuántas/os gaznápiros/as se dedican hoy a ser progresistas, feministas y ecologistas? Están en los ayuntamientos, en la Asamblea, en el Congreso, Senado, Parlamento Europeo y no tienen nada que decir, nada que hacer y nada que opinar, salvo que, eso sí, los ellos/as, son muy progresistas y en el caso de las ellas, que tienen todas la misma pinta, además son también feministas.

¿Qué será lo que toda esta pobre gente entiende por progresismo y feminismo? Conozco a una boba de libro, que ejerce su teatro como diputada y que va por la vida de “progre”, señalando al personal según su particular punto de vista. Ella, la muy necia, con el atrevimiento impúdico de los necios, reparte carnés de progre, machista, franquista, falangista, republicano…usando una retórica tabernaria que hace sonreír a propios y extraños. Alguno de los suyos, avergonzado, intenta justificarla: “no le hagáis caso, ella no tiene mala voluntad, pero la pobre es así” ¿Dónde ponen los progresistas a estas progres de tienda cien? La ponen en cultura, claro. La cultura es cosa de la progresía, porque para ellos la cultura es un invento inútil y electoral y como tal, bien merece el pelaje de una miliciana desgreñada y alpargatada.

Siempre he sostenido que las “mariquitas locas” y “las machorrillas” hacen un daño irreparable a gais y lesbianas, que defienden su tendencia sin estridencias, excentricidades e histrionismos. Lo mismo pasa con las/os culturetas de ocasión. Las/os progres de medio pelo, metidos a administradores o gestores culturales, hacen mucho daño a la cultura, porque la desvirtúan, la disfrazan, la pintorrean y concluyen presentando prototipos que nada tienen que ver con la realidad. Un actor, incluso un actor bueno, no tiene necesariamente que ser culto, sin embargo algunos los asemejan y se engloban dentro del “mundo de la cultura”, uniendo capacidad histriónica y cultura, como uña y carne. Es curioso el desparpajo de alguno de nuestros culturillas, tipo Miguel Bosé, que se sienten dentro del universo cultural porque un día se sentó en las rodillas de Pablo Picasso.

El pelaje despreocupado y la barba de tres días tampoco son sinónimos de cultura, aunque algunos/as lo tengan como único asidero. Flaco favor hacen al progreso y a la cultura todos estos/as pelaespigas, que careciendo de todo, incluso de vergüenza, se aferran al ejercicio de una profesión de la que no tienen ni remota idea. ¿De profesión progresista? ¡Váyanse a hacer puñetas!

sábado, 5 de agosto de 2006

Amanece, que no es poco


Es necesario romper la monotonía, salir, cambiar el día a día para poder oxigenarse y aprender a relativizar los “grandes” problemas de tienda cien, que a veces nos atosigan y encorsetan. La distancia no es el olvido, pero ayuda porque facilita una visión diferente y nos evita el apolillamiento mental que a veces nos levanta un muro para que no podamos ver, ni oír. Yo soy partidario de la distancia real, la que pone kilómetros de por medio, pero si no es posible también he aprendido a distanciarme sin salir de casa, leyendo, escribiendo, curioseando por Internet, oyendo música o visionando una película cuidadosamente seleccionada para la ocasión. Mis preferidas son las de Pepe Isbert, uno de los mejores actores de todos los tiempos, con joyas como “El cochecito”, “El verdugo”, “Bienvenido Mr Marshall” ó “Los ladrones somos gente honrada”. Tengo una película, que suelo dejar a mis amigos en sus horas bajas, que es un auténtico bálsamo para las heridas causadas por las estupidez: “Amanece, que no es poco” de José Luís Cuerda., interpretada por Antonio Resines, Sazatornil, Cassen, Chus Lampreave… y que casi siempre obra el milagro de ofertar una visión diferente de la tontuna, la impertinencia o la torpeza. En mi farmacia particular, “Amanece, que no es poco” es una especie de ungüento que mitiga todos los mares, aparcándolos durante unas horas.

Pero al volver o bajar del guindo, los males siguen ahí, claro, porque lamentablemente no se disuelven con visionados de películas viejas. Todo lo más, bajan la guardia y nos dan un respiro. Digamos que, de un día para otro, las bobadas vuelven de nuevo al trabajo y que el chinato se pasea en esplendor por toda la bota, destrozándonos de nuevo los dedos del pié. La estupidez suele tener mucha consistencia y al volver, nos encontramos de nuevo con el bobo de la esquina, que nos recuerda que las películas son sólo películas y que la realidad es más consistente que nuestro aislamiento de fin de semana. Vuelve el vocinglero, vuelve el presuntuoso, vuelve el analista, el cursi, el pedante y el plasta del vecino que nos aplasta. Vuelve a sonar el teléfono, vuelve el ruido, el griterío y la viscosa presencia de las estupidez humana, con sus acuerdos, sus pactos, sus conciliábulos y debilidades, cantándolas a grito pelado, como un Tarzán en plena selva: “soy imbécil, soy imbécil, soy imbécil”. Vuelve la visión cegata, el interés insensato y la soflama estúpida de los que no son capaces de ver que llevan número premiado, de aislarse y, de guardia permanente, han seguido en el empeño de estropearlo todo, para recordarnos la evidencia de que Dios puso a los gilipollas en este mundo para algo. Ellos, como las moscas, los mosquitos, las cucarachas o los alacranes, también tienen su misión y, fieles a la llamada del instinto, se empeñan en fastidiarlo todo, para que nada cambie, todo siga igual y el barco no encuentre otra solución que la deriva.

Salgan ustedes de sus casas con los ojos abiertos, miren las cosas con sus colores reales y comprobarán que la calle es de los necios, que en los negocios están los necios y que, por ejemplo, en la política los necios, que son legión poderosa, son muchas veces los que toman decisiones por colectivos completos y, lamentablemente, ahora no me estoy refiriendo a los de siempre porque como bien se sabe, en todas partes cuecen habas. Distanciarse sirve para ver que los de tu entorno, también están para el diván del psiquiatra, que hay más necios que colores. Los necios van a lo suyo, que es necear, y no se encomiendan a nadie a la hora de cocinar sus guisos esperpénticos. Los necios siempre se invisten de autoridad, solemnidad y firmeza, aunque su objetivo común sea fastidiar y dejar la casa sin tejado en días de lluvia. Dios, Dios sabrá porqué, los puso ahí para eso.

sábado, 22 de julio de 2006

Disciplina de partido


No voy a criticar que en los grupos políticos haya coherencia y unidad de criterio a la hora de votar, porque, al margen de las ideas personales, si se está en un colectivo debe armonizarse una postura única. O sea, que sí, que veo bien, lo de votar en grupo, pero lo de la disciplina de partido es otra cosa, porque la disciplina es un recurso castrense y, en su ámbito, la voz de mando lo invade todo. El soldado debe avanzar cuando se lo dice su superior, pero en el voto, además del partido, entra también el electorado, la conciencia y la responsabilidad. Para resumir y que se me entienda: los que ostentan un cargo representativo por decisión del electorado, no pueden traicionar ése voto de confianza. No se puede estar en una institución representando a Extremadura y votar contra Extremadura ¿Por qué todo esto? Lo explicaré.

En la Asamblea de Extremadura, se han analizado las consecuencias negativas que para España y Extremadura tiene la reforma del Estatut catalán. Y allí durante el debate, a Ibarra se le cayó la careta y en uno de sus lapsos disparó a bocajarro que aunque el Estatut no le gusta, él lo apoya por disciplina de partido. O sea, lo que muchos ya sabíamos y otros muchos ignoraban: para Ibarra está antes el PSOE que Extremadura. El salvapatria, que se presenta así mismo como héroe patriota y que monta su circo mediático en cada ocasión, es capaz de mirar para otra parte si a su partido le interesa. Ua lo dice incluso él mismo. Ibarra sabe, porque nunca he dicho que sea tonto, que Zapatero está vendiendo a España por parcelas y que el Estatuto catalán agranda las diferencias y rompe la solidaridad tan necesaria para regiones como Extremadura. Ibarra sabe que Extremadura es la región más pobre y atrasada de España, la de mayor paro, menor PIB y menor RPC, pero, aún así, vota contra Extremadura si su partido tiene algún negociete contra otra comunidad, llámese Cataluña, País Vasco o Galicia, donde los nacionalistas sostienen al PSOE y a Zapatero. Ibarra sabe que lo que es lo es por Extremadura, pero no tiene inconveniente alguno en reírse de Extremadura y usar el voto de los extremeños, para tirar un cable a su partido porque como ha dejado claro, lo primero es el PSOE, que Extremadura, pese a la situación que soportamos, puede esperar otros 25 años. Ibarra sabe que esa claudicación en beneficio de su partido hace daño a Extremadura, pero no duda en abusar de la confianza en él depositada, para coger tejas de nuestro tejado y ponerlas en Cataluña.

A Ibarra no le gusta el Estatut catalán, porque conoce sus consecuencias y el desastre en cadena que vendrá tras él, que no se quedará sólo a la hora de romper la baraja. A Ibarra no le gusta el Estatut, pero vota el Estatut, predica el Estatut y organiza desde el PSOE una campaña de difusión y defensa del Estatut. ¿Cabe mayor contradicción? ¿Cómo puede alguien que preside una Comunidad, con respaldo mayoritario durante seis legislaturas, saltarse el principio de fidelidad? Ibarra lo hace porque está convencido de que haga lo que haga, tiene segura la fe ciega de los extremeños. Extremadura es para él una añadido de su partido y como lo primero es lo primero, a la hora de elegir no tiene duda y ocurra lo que ocurra, hace lo que, por disciplina su partido le señala. La disciplina es del partido y no de Extremadura. Ya lo sabíamos muchos, pero ¿se habrán enterado los que todavía lo ignoraban?

Ayer lo dejó claro: entre Extremadura y el partido, se impone la disciplina militante y vota por el partido. Y como él todos los demás, diputados y senadores que fueron capaces de apostar, sin un atisbo de duda, contra los que le dieron el voto. Extremadura, por fin, ya tiene una confesión de parte, llegada directamente del que lleva 24 años en el poder con el voto de los extremeños. Ibarra lo tiene claro, pero ¿lo tiene claro Extremadura?

sábado, 1 de julio de 2006

Perrillos que ladrán


Algunos amigos, ojo avizor, me informan o me pasan directamente los ladridos de algunos perrillos falderos que cabreados consigo mismo, porque en el fondo deben sentir asco, no pierden oportunidad de arremeter desde cualquier tribuna contra mi. Pierden el tiempo, los perrillos ladradores y mis amigos informantes, porque yo no me detengo a recoger las boñigas del camino. Sencillamente no los leo, no los veo, no los oigo y me los salto aunque algún periódico, ayer digno y fiable, ahora en tránsito hacia el pesebre institucional, me los ponga delante. No se puede perder el tiempo con las cagalutas que intentan distraernos y echar un capote al que les paga, porque el objetivo es el que mantiene y sostiene a corrupciones y corruptos, el que ampara las irregularidades, el que vocea y cocea, el que tiene amordazada a Extremadura y con nuestro dinero compra y sella bocas. El objetivo es la piedra angular de un edificio carcomido de intereses y abierto como un queso del que emanan las pestilencias. Por resumir y para que se me entienda, como "muerto el perro se acabó la rabia", hay que ir a por el que sostiene la pirámide y al mismo tiempo es la fresa que la corona. Todo lo demás son bobadas y ganas de perder el tiempo.

Los perrillos ladradores cumplen con su misión y hacen su oficio, que suele ser el de los mamporreros. Tienen los pobres tal vicio que incluso hacen de guía para que el amo los penetre. Alguno de ellos se inviste de escritor y va por la vida con dos poemarios cursis y una novela repipi, para justificar su condición de mandamás en alguna urticaria editorial. Otros se limitan a estar de guardia en la funeraria, para echar sahumerios y mitigar así las pestilencias sobre cualquier muerto que llegue ¡Son capaces de justificar la electrocución de su padre con tal de que el amo se entere de que ellos son fieles, abnegados y que están ahí para lo que haga falta, sabedores de que el amo es tan absolutamente gilipollas que es capaz de premiar su asquerosa disposición y su pertinaz vocación de alfombras.

Pero hay más especias en el corral y tampoco faltan los cabreados de boquiqui, los que van de críticos de guadaña, pero que en el fondo lo que les pasa es que tienen hambre de alfombra y sed de retornar al redil en el que con tanta placidez pastaban. En el fondo son huérfanos de la moqueta... ¿Y los aulladores de la luna? Esos son los de quiero y no puedo, porque no estando conformes, son incapaces de dar la cara y andan siempre sumidos en una nebulosa de protección. Critican, espolean, pontifican y ofrecen soluciones a gogó, al mismo tiempo que se ponen a salvo con cualquier pretexto: "yo no puedo, mi condición de... me impide, es que dependo de un sueldo, tengo pendiente una concesión, están tramitándome unos permisos..."

Extremadura es hoy un abrevadero ideal para todos estos parásitos que, no lo olvidemos, comen de nuestro pan y beben de nuestra agua, pero en la mano del corrupto mayor, el sinvergüenza descreído, que muy pronto detectó la capacidad de algunos para chapotear en la mierda si en ella hay un euro. Por eso no hay que perder el tiempo con los perrillos, chupasangres y mamporreros de vocación! El objetivo fijo, firme y determinante es el apóstol de la mentira, el príncipe de la contradicción, el que sostiene con su podredumbre a la manada ¡Eso sí, con nuestro dinero!

sábado, 17 de junio de 2006

Donde dije digo, digo ...


Un profesor de la UEX, con absoluto sigilo y la consiguiente prudencia, porque sabe que se la juega, está recogiendo datos sobre las contradicciones de Ibarra, para dejarlas en un libro que, sin duda, será todo un éxito de ventas, aunque el problema será encontrar editorial fuera de Extremadura, porque aquí este “franquino” de medio pelo lo tiene todo “atado y bien atado”. Asegura el profesor que tiene cintas grabadas en las que Ibarra, sobre el mismo tema, dice cosas distintas en apenas tres horas de diferencia y que cuando lo explica al día siguiente aún es peor, porque se distancia de los dos postulados del día anterior e introduce otro nuevo... Lo de la autovía Badajoz-Cáceres solo es otro eslabón en la cadena.

Hace mucho que Ibarra perdió el sentido de la realidad y hace mucho que está enclaustrado en el Convento de la Egolatría y rodeado de la congregación de los súbditos de la pitanza, capaces de santiguarse por cualquier eructo suyo. Después de tantos años de aparente democracia, estamos dónde estuvimos y, con muy pocas excepciones, con el mismo miedo que tuvimos. Extremadura es una tierra acojonada, ocupada y mangoneada por un líder tribal, que sólo escucha el movimiento de sus tripas. En Extremadura hay miedo, mucho miedo y casi todo es un remedo, una mera ceremonia de representación democrática porque finalmente decide una sola persona. La Junta de Extremadura es un órgano unipersonal: Ibarra; el PSOE es un órgano unipersonal: Ibarra; la Asamblea de Extremadura es un órgano unipersonal: Ibarra; las diputaciones son un órgano unipersonal: Ibarra, y no es ninguna exageración concluir asegurando que Extremadura es también un órgano unipersonal: Ibarra. Franco tuvo tanto poder como Ibarra (no más) pero lo usó de forma menos grotesca y descarada. La diferencia entre ellos es que Ibarra no presenta ningún problema de legitimidad de origen, que es democrático.

Ibarra se ríe de las sentencias judiciales, incluso de las que señalan que en la Junta hay desviación de poder y favoritismo y, bien demostrado está, ampara y justifica todo tipo de irregularidades, incluido el robo y el uso de la cal viva para ocultar los crímenes de Estado. A Ibarra le da igual que un consejero mezcle lo público con lo privado, se lucre y enrede en las normas para favorecer a los cercanos. Y le da igual, porque él hace lo mismo. Extremadura es suya, él es amo, el que tiene la llave, aunque algunos, como es mi caso, nos carcajeemos de sus idioteces, de su divismo, de lo pobrecito que es y de la servidumbre que le prestan los apóstoles del pesebre.

viernes, 2 de junio de 2006

El Palacio de Congresos de Badajoz


Una de las patochadas políticas más estériles e infantiles de los últimos tiempos nos la ha servido en bandeja ese desastre político que es Francisco Muñoz, consejero de Cultura de la Junta y voluntarioso y risible aspirante a la alcaldía de Badajoz. Sólo siendo un cegato, torpón y maljeta se puede caer en el despropósito de querer imponer a una ciudad como Badajoz el nombre de un socialista fallecido a uno de sus edificios. Y además lo hace con nocturnidad y alevosía para dejar claro aquello que va predicando Ibarra de “el que paga manda”. El que paga con el dinero de todos no puede torcer el brazo a un Ayuntamiento ni perder el respeto a una ciudad digna.

Imponer por la fuerza el nombre de Manuel Rojas al Palacio de Congresos de Badajoz, no es más que un acto de hipocresía e indecencia política, porque a Manolo Rojas, después de revalidar su mayoría absoluta en la corporación pacense, fueron los propios socialistas los que se encargaron de hacerle la vida imposible para finalmente quitarle la alcaldía de forma deleznable. De Manolo Rojas dijeron de todo. De Manolo Rojas hicieron un deshecho político. De Manolo Rojas se separaron como si llevara el campanillo de un leproso y el propio Manolo Rojas se quejaba de que tras su marginación, no era recibido por ningún director general de la Junta a los que quiso acudir para rehacer su actividad profesional… El tema fue tan penoso y el recuerdo es tan cercano que es mejor dejarlo aquí para no caer en la indignidad del aspirante a alcalde.

Ahora todo son loas al fallecido y pretenden hacer de una buena persona y un pésimo gestor, que gastó a espuertas y dejó al Ayuntamiento arruinado, una especie de héroe del municipalismo pacense ¡Mentiras cabalgando sobre mentiras! Pero eso sí, aquella buena persona que fue Manolo Rojas, tuvo la suficiente entereza como para no desviarse de su ruta y, como la madera de sándalo, perfumó el hacha que la había cortado. Es decir, fue tan buen socialista como mal alcalde y la decisión del PSOE de apartarlo de la alcaldía se entendió en Badajoz y nadie pestañeó. ¿A qué viene ahora esta llantina con Manolo Rojas?

El PSOE lo está sacando a pasear como arma arrojadiza contra el gobierno legítimo de Badajoz y está utilizando a Manolo Rojas y a su familia para meter un dedo en el ojo de la Corporación Municipal y de su alcalde, pese a que Miguel Celdrán demostró siempre hacia Manolo Rojas un respeto y una deferencia que jamás tuvieron sus compañeros de partido. A Manolo Rojas lo utilizaron en vida y lo siguen utilizando tras su muerte, pero ahora con el agravante de presentarnos a un Manolo falso, que nada tuvo que ver con el Manolo que conocimos y quisimos.

¿Para qué juegan con el nombre de Manolo Rojas? Es seguro que él jamás hubiera aceptado dar su nombre contra el criterio del Ayuntamiento de Badajoz y la ciudadanía pacense. El mal está hecho, el enredo está servido, la cacicada camina de la mano de un siniestro como Paco Muñoz y el pulso a la legitimidad democrática nos ha mostrado, una vez más, a Ibarra con los tics propios de los dictadores caribeños, adoptando los mismos resortes que Fidel Castro en Cuba. Si le ponemos la gorrita y un puro entre los dedos, hasta se le parece físicamente. ¿Paco Muñoz también? No, Paco Muñoz es el cuervo de José Luís Moreno, que se desplaza en el hombro de Ibarra.

sábado, 20 de mayo de 2006

Los camuflados


En la personalidad de los que escriben anónimos y opinan bajo el camuflaje de alguna cortina, debe haber una patología extraña, porque no se entiende el placer que pueden sacar violentando a una presunta víctima que los ignora u opinando sin atreverse a defender su opinión con nombre y apellidos. Pero el colmo de los colmos es que el camuflado, el escondido, el encapuchado, además de ocultarse cobardemente, se permita censurar a los que vamos por la vida poniendo la cara y firmando nuestros aciertos y errores.

Viene esto a cuento porque ahora, con mucho retraso, me entero de que tras solicitar al director de EXTREMADURA AL DIA que los que quisieran dar su opinión sobre mis artículos deberían identificarse, como lo hago yo, me llovieron chuzos de unos cuantos "escondidos", con la ridícula disculpa de que yo estaba cercenando la libertad de opinión.

Jamás he limitado la libertad de expresión nadie y defender la mía me ha costado y me cuesta cada día, porque son muchos los inconvenientes y zancadillas que hay que superar para ponerse delante del papel, o de la pantalla del ordenador para decir lo que uno piensa, con todo lo que eso conlleva. Opinar es un riesgo voluntario, porque nadie nos obliga, por eso resulta patético, ridículo y nauseabundo que algunos listos pretendan "nadar y guardar la ropa" opinando pero sin la contrapartida del riesgo consiguiente y sin comprometerse con lo que escriben. Personalmente agradezco a los que se toman la molestia de leerme, opinar o discrepar de mis argumentos, pero en igualdad de condiciones. Yo soy yo con todas las consecuencias, en todas las circunstancias, y asumo la responsabilidad de lo que digo y lo que hago, pero no tengo que tolerar el juego sucio de los que quieren estar sin estar, decir sin decir y opinar sin opinar, tirando la piedra y escondiendo la mano. Al final nada de lo que decimos sirve sino lleva el marchamo personal, el sello, la identificación. Ya se sabe que, en ocasiones, es más importante quien dice que lo que dice y, desde luego, no seré yo el que se pare a escuchar discursos desde detrás de un pasamontaña. Se supone que los embozados son los de ETA y me ofende que para discrepar conmigo tenga nadie que ocultarse. En el fondo yo creo que se ocultan de si mismo. Vamos, que les da vergüenza opinar lo que opinan y escribir lo que escriben.

Lo que yo pedí al director de EXTREMADURA AL DIA es tener respecto a los supuestos discrepantes los mismos derechos que ellos, es decir, saber quienes son, para que no haya agravios comparativos ni indefensión por mi parte. ¿Es esto cercenar la libertad? ¡Algunos hablan de libertad y no son capaces de salir de su jaula!